Un sistema de apoyos verbales para evaluar la conciencia fonémica de los niños con discapacidad intelectual (Hessling et al., 2022)

En su etapa más emergente, leer y escribir implica que los niños sean capaces de ensamblar una serie de signos (letras) con sus sonidos (fonemas).  De hecho, sabemos que los niños comienzan aplicando lentamente las correspondencias entre grafemas y fonemas para, con el tiempo y la práctica, ir desarrollando un reconocimiento automático de palabras (Ehri, 2020). Por ello, para poder leer, hace falta, al menos, una habilidad mínima para manipular y representar los fonemas que forman las palabras (conciencia fonémica). Esto no siempre es sencillo para el alumnado con discapacidad intelectual, que demanda programas y tareas muy cuidadas para su desarrollo (Lemons et al., 2015).

El recurso técnico de Hessling et al. (2022)

En algunas investigaciones lo más interesante no está en sus resultados, sino en los interesantes recursos técnicos que usan, por ejemplo, en la recogida de datos. Hessling et al. (2022) plantean en su trabajo que, para los niños con discapacidad intelectual, plantear las tareas de conciencia fonémica como correctas o incorrectas puede ser demasiado simple. Algunos niños tienen un avance lento en el que van siendo capaces de hacer ciertas tareas con cierto apoyo. Para ello desarrollan un sistema de ’prompting’, esto es, una serie de apoyos verbales para ver qué grado de andamiaje precisan los niños para realizar correctamente tareas de conciencia fonémica.

Nivel 0. Sin apoyo

En primer lugar, el profesional pide a los niños que realicen la tarea sin apoyo. Para poder ejemplificar mejor el sistema, añado otras tareas a la expuesta por los autores.

Nivel 1. Apoyo bajo

Si los niños no son capaces de realizar la tarea anterior el profesional da un apoyo bajo. Este consiste en alargar los sonidos de las palabras que son necesarios para responder.

Nivel 2. Apoyo medio

Si los niños no son capaces de realizar la tarea el profesional da un apoyo medio. Este consiste en alargar el primer sonido de la palabra, haciendo también una pausa.

Nivel 3. Apoyo alto

Si los niños no son capaces de realizar la tarea anterior el profesional da un apoyo alto. En este nivel se ofrece al niño la respuesta correcta durante la ejecución de la tarea.

Nivel 4. Modelado

Si los niños no son capaces de realizar lo anterior el profesional ofrece a los niños un modelado y pide a estos que lo imiten.

Conclusiones

Enseñar a niños con discapacidad intelectual o problemas del lenguaje (entre otros) suelen requerir de un uso cuidado de las técnicas de andamiaje. Esto implica que los profesionales diseñan tareas con una serie de apoyos visuales y verbales muy detallados para, progresivamente, retirarlos en función del progreso del niño. Hessling et al. (2022) describen un sistema de apoyos verbales para evaluar la conciencia fonémica del alumnado con discapacidad intelectual (en su caso, niños con Síndrome de Down). Este tipo de apoyo no solo es interesante para evaluar, también lo es para diseñar diversos grados de andamiaje a aplicar durante la intervención educativa (Lemons et al., 2015).

Dejo la referencia principal:

Hessling, A., Jones, R., Melanie Schuele, C. y Camarata, S. (2022). Phonological awareness intervention using a standard treatment protocol for individuals with Down syndrome. Child Language Teaching and Therapy, 38(1), 22-42.